Transicion: Planificacion para la Vida Despues de la Escuela
El sistema educativo puede constituir la base para la planificación
de la transición. El estudiante que recibe servicios educativos
especiales en las escuelas públicas celebra reuniones regulares con la
familia y con el personal de la escuela a fin de abordar el Programa
Educativo Individualizado (IEP) del estudiante. Una vez que el
estudiante esté en la escuela secundaria estas reuniones deberían
empezar a planificar la transición de la escuela secundaria hacia la
vida adulta. La ley federal, la Ley Educativa de Individuos con
Discapacidades (IDEA), requiere que los planes de transición sean
incluídos en el IEP del estudiante cuando alcance la edad de 16 años. A
continuación daremos a conocer la manera cómo el IDEA (P.L. 101-476)
define los servicios de transición:
300.18 Servicios de Transición
Tal como se utiliza en esta parte
del paquete de información, "los servicios de transición" son un
conjunto de actividades coordinadas para un estudiante, diseñadas dentro
de un proceso orientado hacia el resultado, que promueve la transición
de la escuela hacia las actividades post-escolares, incluso la educación
secundaria, el entrenamiento vocacional, el empleo integrado (inclusive
el empleo de apoyo), educación continua y educación de adultos,
servicios de adultos, vida independiente o participación comunitaria.
El conjunto de actividades coordinadas debe basarse en las
necesidades individuales de los estudiantes, tomando en cuenta sus
intereses y sus preferencias; e incluye las actividades necesarias en
las áreas de instrucción, experiencias en la comunidad, el desarrollo
del empleo y otros objetivos de la vida adulta post-escolar y si es
apropiado, la adquisición de destrezas de la vida cotidiana y la
evaluación vocacional funcional.
Algunos estados requieren que la planificación de transición comience
antes de la edad de 16 años. Puede consultar con el departamento de
educación de su estado para confirmar a qué edad comienza la
planificación y servicios de transición. Es importante que las familias y
las escuelas den inicio a la planificación lo más antes posible para
facilitar la transición de la persona con autismo e incrementar el éxito
y la independencia en la vida adulta.
El término clave que podría emplearse al desarrollar los servicios de
transición de un individuo es el Plan de Transición Individualizado
(Individualized Transition Plan o ITP). Este podría ser escrito como
área específica dentro del IEP o como documento separado que es aprobado
por los funcionarios de la escuela y los padres de familia. Un artículo
en Focus, el boletín informativo de la Sociedad de Autismo del Noroeste
de Ohio, "Transition Planning from School to Work" sugiere algunos
componentes del plan de transición:
- El plan, con inclusión de las metas y servicios, debe basarse en las
necesidades de los individuos, las preferencias y necesidades;
- La
planificación de transición debería ser orientada a la vida después de
la escuela y no debe limitarse tan solo a la realización después de
terminar la escuela;
- Debería haber un plan maestro que incluya las metas a largo plazo y un conjunto de actividades coordinadas para cada uno;
- Los servicios proporcionados deberían promover el paso positivo hacia la vida después de la escuela.
La colaboración entre agencias constituye un elemento muy importante
del IEP en la transición del estudiante. El sistema educativo puede
trabajar en colaboración con las agencias tales como el Departamento de
Rehabilitación Vocacional, La Administración de Seguro Social o centros
de vivienda independientes y de apoyo. Estas agencias podrían
proporcionar entrenamiento o servicios directos para ayudar a la
transición del estudiante. Los padres de familia deberían fuertemente
estimular la colaboración entre agencias como parte del IEP. Al pensar
acerca de la transición de la escuela secundaria, a veces es preciso
comenzar el proceso con una lista de preguntas para servir de trampolín
en la discusión. Es también fundamental que el proceso de transición
implique la toma de acción. Después de identificar las áreas de interés y
el establecimiento de las metas, se debe emprender algunos pasos
activos para lograr dichas metas. Por ejemplo, a un estudiante con
autismo con altas capacidades en el manejo de la computadora se le da
permiso para que salga de la escuela temprano unos cuantos días a la
semana para que trabaje como ayudante en la oficina de procesamiento de
datos. Se adquirió esta posición a través de la oficina de
rehabilitación vocacional y ellos continúan proporcionando el apoyo que
se necesita. Antes de que dicho estudiante empiece este trabajo, se le
enseñó los habitos sociales de la oficina y los correspondientes
procedimientos tal como el uso del reloj de control de asistencia. Otro
estudiante quien prefiere estar afuera se encuentra más adecuado para
trabajar en un proyecto de limpieza en la comunidad antes que en una
oficina de cuatro paredes. Este hecho enfatiza la necesidad de
desarrollo de un plan adecuado a las destrezas y preferencias de cada
individuo. Muchos creen que tres o cuatro experiencias diferentes pueden
ser útiles en la evaluación de las necesidades y capacidades de un
estudiante mientras aún todavía se encuentra en la escuela. El objetivo
principal es preparar a todos los estudiantes para la vida después que
termine la secundaria, ya sea que esto implique empleo o educación
superior.
Con la finalidad de ayudar a las familias y a los estudiantes con
discapacidades en la toma de pasos definitivos hacia una transición con
éxito, el Centro Nacional de Información para Niños y Jóvenes con Discapacidades
(National Information Center for Children and Youth with Disabilities)
ha escrito un artículo que puede ser una herramienta útil de consulta,
NICHCY Transition Summary, No.7, setiembre de 1991. Si desea recibir la
totalidad del artículo, por favor ponerse en contacto con NICHCY, PO Box
1492, Washington, DC 20013-1492, 800.695.0285.
El proceso de transición es un proceso complejo que implica la toma
de muchas decisiones. Las opciones de un estudiante después de la
secundaria pueden ser incrementadas mediante un plan de transición
adecuado. Cuando al estudiante se le da la oportunidad de experimentar
diferentes medios ambientes y desarrollar habilidades de trabajo
apropiadas, será capaz de eligir el mejor camino. Un buen plan de
transición permite que los padres de familia, el personal de la escuela y
los funcionarios de las agencias pertinentes trabajan unidos para hacer
disponibles estas oportunidades.
http://www.autism-society.org